Análisis de caso del Informe publicado por la Escuela de Leyes de la Universidad de Columbia :
"Los tocayos Carlos: anatomía de una ejecución equivocada" Una vez más nos encontramos ante un caso en el que un inocente fue declarado culpable y condenado a pena de muerte. Este hecho fue recordado esta semana gracias a una investigación que ha sido considerado por especialistas en leyes como un revelador cuerpo de investigación que dejaría en evidencia, debilidades en el sistema policial, investigativo y judicial estadounidense. Relato de los hechos Carlos De Luna recibió la pena capital por el asesinato de Wanda López, la cual trabajaba sola en la noche en una tienda de Corpus Christy, Texas, en febrero de 1983 cuando un hombre la atacó para asaltarle y la apuñaló con un cuchillo de siete pulgadas. De Luna fue encontrado por la policía debajo de una camioneta y fue llevado a la tienda, un testigo anglosajón lo identificó como el hispano que vio saliendo del establecimiento, por lo cual fue apresado y hasta la fecha en que fue ejecutado sostuvo su inocencia y declaró que había sido confundido con el verdadero asesino y tocayo, Carlos Hernández. La investigación policial ignoró dicha afirmación, y Hernández fue declarado en el juicio como un fantasma inexistente. Este caso a diferencia de otros fue investigado por la acreditada Escuela de Leyes de la Universidad de Columbia, 20 años después. Cuatros años después de una intensa investigación, se descubrió que realmente existía un Carlos Hernández, que había cometido 39 delitos y que había sido apresado, Hernández fue encarcelado por asaltar a otra mujer, aunque para ese entonces tampoco se estableció una posible relación entre ambos hechos. Hernández murió tras las rejas a causa de una cirrosis hepática en 1999. Dos meses antes de la inyección de De Luna. Los puntos que están siendo cuestionados a raíz de este informe son los siguientes:■ Mal funcionamiento del sistema judicial estadounidense.
■ Poco interés en resolver un caso en el que se involucraba a hispanos.
■Errores procedimientos legales y peritajes forenses.
■La pena de muerte.
A continuación presento cuadro que incluye errores de procedimientos legales y peritaje forense a mi juicio.•
ERRORES EN EL PROCEDIMIENTO JUDICIAL
•No se tomó en cuenta que en varias ocasiones el acusado dijo que el responsable del crimen era Carlos Hernández, el caso fue cerrado con el arresto De Luna
. • No se tomó en cuenta la información dada por un testigo que dio fechas y datos para comenzar a distinguir un Carlos del otro.
•Las autoridades no relacionaron el cuchillo tipo Buck- con Carlos Hernández, pese a que éste llevaba uno similar a la vista de todos. •
No se tomó en cuenta que Carlos Hernández dijo en varias ocasiones antes de morir en la cárcel en 1999, que el era el verdadero culpable.
ERRORES FORENSES
La escena del crimen estaba ensangrentada, De Luna no tenia manchas de sangre ni en su cuerpo ni en su ropa al momento de ser arrestado.
•La descripción física dada por los testigos no correspondía a la De Luna(la descripción era la de un hombre mal vestido, sin afeitar y con ropa de colores).
•Exclusión del expediente, de la llamada al 911 realizada por Wanda López.
• No se tomaron las huellas dactilares a latas de cervezas.•No se tomo en cuenta el desplazamiento del asesino, según testigos el huyó hacia el Norte y De Luna fue encontrado en el Este.
• El fiscal del caso concluyó que “el otro Carlos” era un invento de la imaginación, se debió haberse realizado una evaluación psicológica más exhaustiva.
CONCLUSION
El mal manejo de los procedimientos legales y forenses trajo como consecuencia que un inocente fuera declarado culpable. Sin ánimos de justificar, el parecido físico entre ambos era increíble el peso y la estatura era similares a un punto tal que una hermana de De Luna los confundió en unas fotos y para colmo llevaban el mismo nombre. Entendemos que hace 29 años atrás no había los avances tecnológicos con lo que contamos hoy en día, esta investigación tomo seis años, fue preciso elaborar el perfil psicológico de un alcohólico que portaba arma blanca, para dar con el verdadero culpable. Son muchos los casos de errores entre ellos citamos el caso del dominicano Fernando Bermúdez después de 20 años encarcelado fue demostrada su inocencia, también el caso de Luis González III. Es responsabilidad de la parte legal y forense realizar una investigación a profundidad para evitar que estos hechos lamentables sigan ocurriendo. Esto se logra trabajando con un equipo multidisciplinar e integral, abogados, psicólogos, investigadores, sociólogos especializados en el área de investigación criminal. Este hecho que ha llamado la atención pública y posiblemente podría generar un cambio en las leyes en Texas. Nota : El informe presentado consta de 400 páginas y no ha sido traducido al español . Yocelyn GonzálezPsicóloga especializada en el área jurídica-criminológica .
"Los tocayos Carlos: anatomía de una ejecución equivocada" Una vez más nos encontramos ante un caso en el que un inocente fue declarado culpable y condenado a pena de muerte. Este hecho fue recordado esta semana gracias a una investigación que ha sido considerado por especialistas en leyes como un revelador cuerpo de investigación que dejaría en evidencia, debilidades en el sistema policial, investigativo y judicial estadounidense. Relato de los hechos Carlos De Luna recibió la pena capital por el asesinato de Wanda López, la cual trabajaba sola en la noche en una tienda de Corpus Christy, Texas, en febrero de 1983 cuando un hombre la atacó para asaltarle y la apuñaló con un cuchillo de siete pulgadas. De Luna fue encontrado por la policía debajo de una camioneta y fue llevado a la tienda, un testigo anglosajón lo identificó como el hispano que vio saliendo del establecimiento, por lo cual fue apresado y hasta la fecha en que fue ejecutado sostuvo su inocencia y declaró que había sido confundido con el verdadero asesino y tocayo, Carlos Hernández. La investigación policial ignoró dicha afirmación, y Hernández fue declarado en el juicio como un fantasma inexistente. Este caso a diferencia de otros fue investigado por la acreditada Escuela de Leyes de la Universidad de Columbia, 20 años después. Cuatros años después de una intensa investigación, se descubrió que realmente existía un Carlos Hernández, que había cometido 39 delitos y que había sido apresado, Hernández fue encarcelado por asaltar a otra mujer, aunque para ese entonces tampoco se estableció una posible relación entre ambos hechos. Hernández murió tras las rejas a causa de una cirrosis hepática en 1999. Dos meses antes de la inyección de De Luna. Los puntos que están siendo cuestionados a raíz de este informe son los siguientes:■ Mal funcionamiento del sistema judicial estadounidense.
■ Poco interés en resolver un caso en el que se involucraba a hispanos.
■Errores procedimientos legales y peritajes forenses.
■La pena de muerte.
A continuación presento cuadro que incluye errores de procedimientos legales y peritaje forense a mi juicio.•
ERRORES EN EL PROCEDIMIENTO JUDICIAL
•No se tomó en cuenta que en varias ocasiones el acusado dijo que el responsable del crimen era Carlos Hernández, el caso fue cerrado con el arresto De Luna
. • No se tomó en cuenta la información dada por un testigo que dio fechas y datos para comenzar a distinguir un Carlos del otro.
•Las autoridades no relacionaron el cuchillo tipo Buck- con Carlos Hernández, pese a que éste llevaba uno similar a la vista de todos. •
No se tomó en cuenta que Carlos Hernández dijo en varias ocasiones antes de morir en la cárcel en 1999, que el era el verdadero culpable.
ERRORES FORENSES
La escena del crimen estaba ensangrentada, De Luna no tenia manchas de sangre ni en su cuerpo ni en su ropa al momento de ser arrestado.
•La descripción física dada por los testigos no correspondía a la De Luna(la descripción era la de un hombre mal vestido, sin afeitar y con ropa de colores).
•Exclusión del expediente, de la llamada al 911 realizada por Wanda López.
• No se tomaron las huellas dactilares a latas de cervezas.•No se tomo en cuenta el desplazamiento del asesino, según testigos el huyó hacia el Norte y De Luna fue encontrado en el Este.
• El fiscal del caso concluyó que “el otro Carlos” era un invento de la imaginación, se debió haberse realizado una evaluación psicológica más exhaustiva.
CONCLUSION
El mal manejo de los procedimientos legales y forenses trajo como consecuencia que un inocente fuera declarado culpable. Sin ánimos de justificar, el parecido físico entre ambos era increíble el peso y la estatura era similares a un punto tal que una hermana de De Luna los confundió en unas fotos y para colmo llevaban el mismo nombre. Entendemos que hace 29 años atrás no había los avances tecnológicos con lo que contamos hoy en día, esta investigación tomo seis años, fue preciso elaborar el perfil psicológico de un alcohólico que portaba arma blanca, para dar con el verdadero culpable. Son muchos los casos de errores entre ellos citamos el caso del dominicano Fernando Bermúdez después de 20 años encarcelado fue demostrada su inocencia, también el caso de Luis González III. Es responsabilidad de la parte legal y forense realizar una investigación a profundidad para evitar que estos hechos lamentables sigan ocurriendo. Esto se logra trabajando con un equipo multidisciplinar e integral, abogados, psicólogos, investigadores, sociólogos especializados en el área de investigación criminal. Este hecho que ha llamado la atención pública y posiblemente podría generar un cambio en las leyes en Texas. Nota : El informe presentado consta de 400 páginas y no ha sido traducido al español . Yocelyn GonzálezPsicóloga especializada en el área jurídica-criminológica .